Guille Andrés, el pirotécnico del Celta B

2015071801182414782

Guille Andrés con la equipación del Valladolid | ©atlantico.net

Nació, como toda estrella, con el balón bajo sus pies. Conformó sus primeros pasos en los campos de tierra de su ciudad natal: Xàtiva. Y, al igual que cualquier renacuajo de su edad, empleaba su tiempo libre jugando con sus amigos a un rondo cuando salía del cole. Sus raíces técnicas comenzaron así, a los seis años en la Escuela de Fútbol Plus Xàtiva, los auténticos culpables del valioso talento que gozaba este prematuro benjamín. El conjunto setabense vio crecer su pasión por el futbol e incrementó su curiosidad por el balompié profesional.

Sus huellas seguían alimentado la calidad determinante hasta finalizar su etapa en el club, con 18 años. En ese momento, el juvenil del Villareal C.F toma las riendas de su indeciso futuro y ofrece al jugador continuar su formación futbolística en sus líneas delanteras. Su etapa juvenil culmina al mismo tiempo que su estancia en el club submarinista a finales de la temporada 2011, regresando a casa. En este sentido, defendería la camiseta del Olímpic de Xàtiva, el equipo de su ciudad.

En un año donde apenas disfruta de minutos, el Wigan Athletic, situado en Manchester, muestra interés por su juego y recluta durante dos temporadas a la joven promesa valenciana. Del 2012 hasta 2014 empieza un nuevo ciclo en la categoría sub-21. Tras dos años en suelo inglés, ficha por el Valladolid de segunda. Durante su estancia en el conjunto pucelano tuvo oportunidades con el primer equipo. En su estreno en primera disputo durante la Copa del Rey, anotando el gol de la victoria ante el Girona.

Su contrato finaliza y el Celta B le ofrece contrato por una temporada al joven valenciano. La idea de incorporarse en las filas de Javi Tores y, posteriormente, a órdenes del actual míster, Alejandro Menéndez entusiasmó al jugador, quien se atrevió a embarcarse en una nueva aventura alejado de sus lares familiares.

Hablamos, así, con el protagonista de nuestra historia, Guille Andrés. Sus amistades más cercanas lo definen como un chaval independiente, decidido y maduro. Y no es para menos, tras haberse enfrentado él solo al destino de la vida durante cinco años. Sin embargo, su travesía parece que no va a terminarse, por ahora. El propio Andrés afirma que le gusta “ir día a día, sin planificar nada porque cada año estoy en un sitio diferente”. Nos enfrentamos, pues, a una promesa de 23 años viajera, ambiciosa, con mucha vitalidad; lleno de energía para incrementar su destreza su y enriquecer mayor sueño: vivir del mundo del fútbol.

¿Cómo fueron tus inicios y la adaptación a tu nuevo equipo?

Fueron fáciles, gracias a que no era mi primera vez en un club nuevo. Además, la gente me acogió muy bien. Te acoplas rápido porque son gente de tu edad que les gusta lo mismo que a ti.

¿Qué te ha aportado esta temporada, tanto a nivel profesional y personal?

He crecido mucho. Ir a un club nuevo hace que te tengas que amoldar muy rápido a su estilo de juego, ya que desde el principio quieres demostrar de lo que eres capaz. A nivel personal también diría que son experiencias que siempre voy a tener presentes, conoces a mucha gente, vives en otra ciudad… son cosas que no se olvidan.

Por experiencia habrás notado que el fútbol se practica de manera distinta alrededor del mundo. ¿Qué diferencias encuentras entre el  juego inglés y el español?

Yo diría que el fútbol inglés es más agresivo, con muchas más disputas y juego más directo. En el fútbol español, los equipos intentan jugar mucho más al fútbol desde atrás e inculcan desde pequeños el aspecto técnico.

A pesar de que llevas cinco años fuera de casa y eres todo un viajero, es inevitable preguntarte cómo es vivir en Galicia.

Vigo es una ciudad que me ha gustado mucho. A pesar de ser pequeña tiene muchos sitios y rincones para disfrutar y visitar. Las ciudades de alrededor son encantadoras y muy bonitas para ver. Llevo cinco años fuera de casa, como bien dices, y se hace difícil, pero eres consciente de que va ligado al mundo del fútbol. Soy una persona que no tiene problema ninguno en estar fuera de casa y me gusta la idea de conocer cada año una ciudad y cultura diferente.

¿Qué te ha parecido, pues, la gente gallega y su afición? Imagino que debe ser diferente a la de Inglaterra…

La gente me pareció muy abierta y muy simpática. La verdad es que me ha gustado mucho en ese aspecto. En cuanto a las aficiones, sí que he de decir que las inglesas nos ganan, viven mucho el fúbol. No dejan de animar a su equipo esté donde esté y eso es de alabar.

¿Compaginar tus estudios con el mundo del fútbol resulta difícil?

El tema de los estudios es complicado, sí. Al moverme tanto los realizo online, pero a muchos exámenes no puedo asistir al ser sábados y domingos porque tengo partido. Estoy en segundo curso del Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (CAFD) y me lo voy sacando poco a poco. Cuando termine de jugar al fútbol, porque esta carrera es corta, me gustaría haber terminado la carrera y seguir trabajando en lo que me gusta.

¿Qué consejo le darías a todos los  que quieren seguir tus pasos y dedicarse a esta profesión en el futuro?

Les diría que no tengan miedo a nada, que se esfuercen al máximo para conseguir lo que se propongan. Cuanto más trabajo realices, más posibilidades tendrás de alcanzar lo que te gusta y mejor preparado estarás cuando tengas la oportunidad de demostrarlo. Cada persona es un mundo y tienes que intentar ser mejor cada día.