Vuelta al cole para universitarios
Llega la vuelta al cole. Volvemos a las rutinas de la universidad o del trabajo, si eres uno de esos lectores que ha tenido la suerte de encontrar uno –sí, los de las Feugas también contáis-. Probablemente hayas pasado la mayor parte de tus días veraniegos de playa en playa, de fiesta en fiesta y de resaca en resaca. Probablemente, salvo que vivas en Santiago, mucha fiesta pero poco sol. También es posible que hayas leído todos esos libros que tenías pendientes, te hayas puesto al día en tus series favoritas y hayas ido a mil y una actividades culturetas. En Santiago no habremos tenido sol, pero música hasta aburrir. Si algo no nos quita las ganas la lluvia es de empaparnos de la música y festivales locales. Blues con The Lákazans, música sufí del Rajastán con los Barmers Boys o verdaderas obras maestras clásicas con Sumrrá. India, Praga, Texas y tantas otras ciudades nos han visitado este verano en la capital jacobea, y no lo digo por los guiris, que también.
En Santiago no habremos tenido sol, pero música hasta aburrir. Si algo no nos quita las ganas la lluvia es de empaparnos de la música y festivales locales.
Los de Santiago somos unos culturetas, y coolturetas también, y si no esperad a que vuelvan los compañeros universitarios. Modernos y modernas regresan un año más. Herederos de los veteranos seguidores de tendencias. Pupilos de los influencers de la carrera que siguen a influencers que ni carrera tienen, pero sí Instagram.
Volvemos, todos volvemos, no por Navidad que es cuando nos vamos a casa, sino en setiembre cuando hace la calor. Y es que eso dicen. Que en la ciudad del apóstol sol en verano ni hablar, pero espérate a septiembre. Regresamos un año más a los pisos de estudiantes, esos que se alquilan por millonadas pero que tienen tantos años como tu abuela. Te dicen que están cerca de Plaza Roja y que la zona es muy cotizada. Y tú qué vas a decir. Solo eres un aprendiz de moderno y aún no sabes nada, ni que se queda en el Zara de Plaza Galicia ni que Apolo está de capa caída. No sabes nada. Para los nuevos hasta Liberty está abierto. Para los veteranos Tarasca volverá a ser su casa.
Solo eres un aprendiz de moderno y aún no sabes nada, ni que se queda en el Zara de Plaza Galicia ni que Apolo está de capa caída.
Pero al final todos volvemos, unos por primera vez, otros vienen para volver. Y todos vamos a sufrir de lo mismo. Madrugones, horas vacías y hacer la comida cuando es jueves y ya no quedan tuppers de casa. Pero benditas nuevas tecnologías. Lo arreglan todo y nos hacen la vida más fácil. Y hoy, ahora, o si es mañana cuando lo lees, verás que han inventado estos “remedios” para que los veinteañeros “volvamos al cole”:
1. Hemos vuelto a la época de la dictadura del despertador. Levantarse de nuevo a las ocho no es fácil. Por eso existen apps como Carrot Alarm, que hacen que la alarma suena hasta que resuelvas un juego. Salvo que tu compañero de piso con clase de tarde te lo tire por la ventana antes.
2. Las siestas, los peores enemigos del estudio, especialmente si ayer estuviste hasta las tantas dándolo todo en Retablo. Pero si quieres que media hora de siesta sea media hora y no dos, prueba Sleep as Android. Escribes los minutos que quieres dormir y la app empezará la cuenta atrás para despertarte. Pero olvídate de desactivar la alarma deslizando el dedo sobre la pantalla y prepárate para resolver operaciones matemáticas. Todo por tu bien y el de tus estudios, y por el de tus padres, que seguramente sean los que paguen.
3. Ya no estamos en casa. Estamos en un piso por el que han pasado más generaciones de las que crees. Y la cocina será un campo de batalla del que no puedes escapar. Seguramente no cocines tan mal. Pero eres vago, torpe, perezoso o simplemente prefieres pagar por comer fuera. Pero cuando los bolsillos flojean no queda otra que coger la sartén y cruzar los dedos para que no quede crudo. Parece que alguien también pensó en esto, en la vuelta, y creó CookPad, una web de cocina que propone recetas sencillas y económicas para todos los gustos. Compruebas qué tienes en la nevera, buscas en la página y ¡a los hornillos! –o vitro, si eres de los afortunados con piso reformado-.
4. Si eres de fuera de Santiago acostúmbrate de nuevo a la lluvia y al frío. Pero a veces sale el sol y para evitar que salgas del piso con katiuskas, una bufanda que podría ser la manta del sofá y el abrigo de pelo más gordo que has encontrado en rebajas, vete descargando una app del tiempo. Porque vuelves a la universidad, vuelves a Santiago y, sobre todo, vuelves a no saber nada sobre el tiempo.

La bufamanta, también conocida como la mítica manta de cuadros del sofá. | Ⓒ Chitrampeandotrends.wordpress.com.com
Volvemos a las clases, a los libros y a los apuntes. Pero también a las fiestas, a las cañas y a los mejores años de tu vida. Disfruta. Coge el paraguas. Y buena suerte.