No todos suman 3+2
Aunque la Educación todavía no esté considerada como un asunto de Estado, las protestas en torno a ella salpican todo el territorio. Dos de las ciudades más importantes de nuestro país, Barcelona y Sevilla, han teñido sus calles de colores republicanos, verdes y rojos para luchar por una enseñanza cada vez más alejada del adjetivo “pública”. El cambio de 4+1 al 3+2 supone que los alumnos tengan que rebuscar en sus carteras para poder pagar un máster cuyos precios no tienen nada que ver con la palabra accesibilidad; desequilibrio entre las Universidades, que tienen libertad para aplicar cuando consideren dicha reforma, y la convivencia de tres sistemas educativos diferentes dentro de una misma facultad. Ante esto, los estudiantes han decidido salir de nuevo a las aceras, bandera y pancarta en mano, con un único objetivo, hecho consigna en ambas ciudades: “Esta reforma la vamos a parar”.
Barcelona
Fotos: Paula Pérez Fraga
Sevilla
Fotos: Carolina Neira Feáns