La corona de Telmo Zarra
La acción, por rutinaria, puede considerarse ya un clásico. Leo Messi está situado en la frontal del área y, tras un doble amago de disparo, golpea el balón para que entre rozando el palo. En esta ocasión, la zurda infalible acababa de convertir su segundo tanto de la noche para situar el 3-0 definitivo en el marcador. El Barça arrancó así el curso con goleada frente a un pobre Elche mientras el crack argentino reivindicaba su posición, tan discutida en los últimos meses. Para Messi la primera temporada del nuevo Barça de Luis Enrique será un ejercicio en el que recuperar sensaciones. No le faltarán motivaciones a un futbolista que en las próximas jornadas se convertirá en el máximo goleador histórico del campeonato nacional de liga.
Precisamente frente al Elche, durante la disputa de la quinta jornada, Cristiano Ronaldo completaba otra exhibición goleadora. “Estudiar a Cristiano Ronaldo es como cuando en la NBA se intentaba plantear cómo parar a Michael Jordan” comentaba un resignado Fran Escribá después de que su equipo cayera derrotado por cinco goles a uno, con cuatro tantos anotados por el portugués del Real Madrid. Tres días antes había marcado otros tres goles más en un escandaloso 2-8 frente al Dépor en Riazor. Dos hat-tricks que permiten a Cristiano incluir un par de balones firmados a su colección personal y sumar veintiún partidos de liga con tres o más goles, situándose a sólo uno del récord.
Y es que el fútbol español sufre la voracidad de dos monstruos dispuestos a destrozar todas las marcas. Desde la llegada de Cristiano Ronaldo al Real Madrid en el año 2009, el eterno duelo que protagonizan el portugués y Messi ha motivado el derribo de todos los récords goleadores conocidos. Con ellos superar la barrera de los cuarenta goles en un campeonato de liga se ha convertido en algo cotidiano y no se prevé un bajón en sus registros anotadores a corto plazo. Ambos aspiran a ocupar las dos primeras plazas de la lista de goleadores históricos y Messi con 248 goles (247 según el diario Marca, que le quita un gol que sí fue registrado en el acta arbitral) se encuentra a tan solo tres de Telmo Zarra. Un Telmo Zarra que comparte con Di Stéfano el récord de veintidós partidos con tres o más goles que persigue Cristiano Ronaldo.
La figura de Zarra protagoniza infinidad de récords en el fútbol español aunque parece que por fin ha llegado su momento de abandonar el trono. Desde que jugó su último partido en primera división en 1955 muchos de sus registros permanecieron intactos durante décadas pero no es casualidad que en 2011 uno de sus grandes logros fuera superado cuando Cristiano Ronaldo anotó 41 goles en un solo torneo (superando los 38 que convirtió Zarra en la temporada de 1951). La nueva generación de estrellas está destinada a adjudicarse el lugar privilegiado que ocupa Zarra en los libros de estadísticas.
Por suerte, el legado de Telmo Zarraonandia Montoya (Erandio 1921 – Bilbao 2006) no se compone únicamente de cifras. Desde que debutara en el Athletic Club de Bilbao a principios de los años cuarenta heredó el instinto goleador del legendario Rafael Moreno (más conocido como Pichichi) y pronto se convirtió en la principal estrella de fútbol español durante los primeros años de postguerra. En el conjunto bilbaíno formaría una delantera histórica con Iriondo, Venancio, Panizo y Gaínza que alzaría un trofeo de liga y cinco de copa. Fueron quince temporadas dedicas a perforar porterías rivales las que lo convirtieron en un ídolo para la grada de San Mamés. Durante sus años en activo fue también la máxima referencia de la selección española, con la que completaría una destacable actuación en el mundial de Brasil de 1950.
La falta de material audiovisual sobre la carrera futbolística de Zarra (es difícil encontrar grabaciones más allá de su archiconocido gol frente a Inglaterra en el mundial) dificulta la tarea de mantener el recuerdo del jugador bilbaíno. Con este propósito se rindieron algunos homenajes, como la inauguración de un busto con su imagen que preside las instalaciones deportivas de Lezama (campo de entrenamiento del Athletic Club), o la instauración del Trofeo Zarra, que es otorgado a los máximos goleadores españoles de primera y segunda división. Estos reconocimientos cobrarán más importancia ahora que el nombre de Zarra comienza a desaparecer de las listas de récords.
Aunque no todas las marcas de Telmo Zarra serán superadas a corto plazo. Sus 81 goles en Copa del Rey están muy lejos de ser alcanzados y la dualidad Cristiano-Messi tiende a repartir los galardones de máximo goleador de la temporada (dos tiene el portugués y tres el argentino) manteniendo el récord de Zarra en seis trofeos Pichichi. Habrá que esperar para ver si Cristiano o Messi pueden romper también estos récords. Y si no, habrá que esperar la llegada de otro monstruo.