Los minijuegos y la procrastinación

Con el mes de junio más cerca del final que del comienzo más de un universitario gallego está a punto de empezar las recuperaciones de verano. Mientras que algunos ya comenzaron recientemente los exámenes otros están a punto de hacerlo, y miran los días soleados y calurosos desde la ventana de la biblioteca. Sin embargo, la gran habilidad del estudiante, y más en estas complicadas épocas de trabajo, siempre ha sido la de procrastinar. Esta extraña palabra puede ser resumida en el “ya lo haré” o “todavía me queda tiempo”. esas expresiones que a más de uno se le pasan por la cabeza cuando toca ponerse y se nos ocurren nuevas formas de perder el tiempo y aplazar el trabajo. Como en Composfreaks somos solidarios, queremos ofreceros nuevas formas de llevar la procrastinación a otro nivel que esté más allá de presionar F5 cada minuto en vuestro perfil de Facebook o seguir en Twitter las publicaciones de  Nacho Vidal.

Logo Flappy Bird

Flappy Bird es uno de los videojuegos flash que ha estado más de moda recientemente. Simple, divertido y adictivo. | Fuente: sparknewspaper.co.uk

Lo más peligroso para un estudiante que quiera ponerse a trabajar es cualquier cosa con acceso a Internet. No solo porque en ese momento se nos ocurren las dudas más absurdas y preferiremos pasar una tarde en Wikipedia leyendo sobre las tradiciones de alguna tribu perdida en Papúa Nueva Guinea, que abrir nuestros apuntes de Bioquímica I o Derecho Romano II. De todas formas, este no es el mayor peligro con el que os vamos a tentar en Composfreaks, porque nosotros lo haremos desde nuestro gremio, el de los videojuegos, y de forma más exacta en las páginas de minijuegos. Eso sí, con permiso de los grandes triunfadores como son Candy Crush, Angry Birds o Ninja Fruit.

Si para mucho Minijuegos fue un clásico de su infancia donde pasar las horas a falta de los últimos lanzamientos en videojuegos, otra página muy recomendable y por cortesía del canal de animación para adultos Adult Swim es Adult Swim Games. El contenido de esta página está dominado por un humor absurdo y claramente orientado al público adulto muy en sintonía con el canal de animación. Uno de los mejores ejemplos de sus ofertas es el Robor Unicorn Attack, donde podremos ser unicornio robot, jugando en el sistema clásico de plataformas.

Tobot Unicorn Attack

¡Qué majestuoso! | Fuente: free-flash-games.net

Otras páginas donde invertir vuestro tiempo en lugar de estudiar son por ejemplo Armor Games, la cual requiere registro. Es último es algo que por simple pereza le puede echar atrás a más de uno, ya que al final solo buscamos una distracción rápida y no una nueva aventura on line. De todas formas ello se compensa con la buena calidad de sus ofertas gratuitas. Mjuegos es otra más dentro de las ofertas de Internet, y ligeramente orientada a móviles o tabletas, pero sin dejar de lado el PC. La referencia perfecta para matar el tiempo antes de entrar al examen. Otra de las recomendaciones es Free Flash Games, con una interfaz sencilla y oferta variada en varios géneros. Un catálogo amplio en clave flash donde poder recordar cómo era el Prince Of Persia.

Para terminar estas pocas recomendaciones quedan dos. Si comenzamos hablando de Minjuegos como uno de los clásicos conocidos por todos, toca terminar con otro buen clásico, Miniclip. Una página completa, que sin embargo a más de uno le puede incomodar por la necesidad de descargar un complemento para el navegador con más de un juego. Por último, los clásicos tienen siempre un lugar destacado en nuestra sección. Para esto está Classic Games Arcade, con los clásicos de las décadas anteriores pero en nuestro navegador. Fácil y cómodo. En ella podemos encontrar desde el primer Street Fighter hasta el gran Pac Man. Todos ellos en flash y sin necesidad de registrarse, la opción más viable para los nostálgicos de la Super Nintendo o la MSX.

De esta forma cerramos con algunas páginas para pasar el rato en la biblioteca si conseguís que no os echen de ella. Procrastinar es, en el fondo, la mejor forma de preparar las recuperaciones, o al menos, descargar la tensión de tanto estudio. Porque al final todo somos el Gato Estudiante.

Imagen destacada: evercreative.net