Fantasy sport: una forma diferente de vivir el deporte

En los últimos años, especialmente desde la aparición de este maravilloso mundo del Internet, los fantasy sports se han ido haciendo un hueco para situarse como uno de los juegos virtuales deportivos con mayor número de consumidores en la red. El término ‘fantasy sports‘, cuya traducción literal sería ‘deportes de fantasía’, sirve para denominar a un tipo de juegos que se basan en una premisa muy sencilla: el usuario debe conformar su propio equipo, y según el desempeño que realice cada uno de los componentes del mismo, recibirá unos puntos determinados. Al final del torneo o temporada en la cual se centra el juego, el vencedor es el equipo con mayor cantidad de puntos.

Pero el origen de estos fantasy sports está mucho más atrás de lo que uno podría pensar. El deporte pionero en este tipo de juegos es el golf, durante la década de los 50. Nació como una especie de pasatiempo complementario a la competición y su funcionamiento era extremadamente básico: cada uno de los participantes debía elegir un número determinado de golfistas profesionales, y al finalizar el evento se contabilizarían los golpes que habían necesitado cada uno de ellos para completar todos los hoyos del circuito. El jugador cuya suma fuese más baja sería el ganador de este primer y particular fantasy game.

Posteriormente, en la década de los 60, un profesor de la Universidad de Harvard creó una especie de seminario de baseball, donde se elaboró un poco más la idea de los fantasy sports: varias personas pertenecientes al complejo universitario participaban en un juego similar, que consistía en conformar un equipo con varios jugadores y luego dar una puntuación a cada uno de ellos teniendo en cuenta unas estadísticas determinadas. Pero el verdadero momento de desarrollo de este tipo de juegos, en los que se sentaron las bases de lo que son actualmente los fantasy sports, llegó en 1976. El centro neurálgico de esta evolución fue un restaurante neoyorquino llamado La Rotisserie, donde todos los clientes podían participar en el juego, que giraba en torno a la liga de baseball. La particularidad consistía en que esta nueva modalidad permitía seguir el juego en vivo: los dueños del restaurante irían contabilizando los puntos de cada participantes cada semana, y además entre jornada y jornada, los jugadores tenían la posibilidad de realizar cambios.

Pese a que los fantasy sports son ahora un hobbie muy popular, originalmente nacieron como un simple pasatiempo durante un torneo de golf, y tardaron varias décadas en asentarse como un juego para grandes colectivos.

El siguiente paso se dio al romper una barrera importante: hacer de los fantasy sports una diversión global, pues hasta entonces estos juegos se hacían en grupos, ya sea de amigos o de alguna asociación, pero estaban reservados a colectivos concretos. En la década de los 80 el crecimiento fue determinante, e incluso este hábito se extendió a otro tipo de deportes, aunque el punto de acción continuaba a estar ubicado en los Estados Unidos.

Fue a finales de la década de los 90, y especialmente en el siglo XXI, con el ‘boom‘ causado por la llegada de Internet, cuando este tipo de juegos empezaron a alcanzar más fama y el número de usuarios comenzó a crecer en una progresión mucho mayor a la anterior. La aparición de la web proporcionaba a los fantasy sports una plataforma novedosa, única, y — lo más importante — que permitía que cualquiera desde su casa pudiese participar sin ningún tipo de problema. Comenzaron a aparecer incluso asociaciones dedicadas exclusivamente a crear juegos de este tipo.

Cuando esta industria llegó a Europa, la gran mayoría de fantasy’s estaban dedicadas al fútbol, un deporte que al otro lado del charco no gozaba (ni goza) de tanta popularidad como otros. Concretamente en España, el primer juego de este estilo en destacar fue el promovido por el diario Marca, que cuenta con el dudoso honor de ser una de las pocas fantasy’s de pago. Sin embargo, tiene mucha popularidad y un gran número de jugadores, debido a que también ofrece cuantiosos premios económicos. Otro que destaca a nivel nacional es el Comunio, si bien el funcionamiento interno del juego difiere ligeramente del de los demás. En éste, los participantes están dividos en mini-ligas y se ‘reparten’ los jugadores, no como en las fantasy’s habituales, donde cada jugador puede escoger a quien quiera. Además, Comunio tiene otras particularidades, como un sistema de fichajes bastado en la subasta, por ejemplo.

Fantasy Premier League

Fantasy Premier League

Hay también empresas que han realizado diversos juegos de este tipo, como es el caso de Yahoo o de los canales televisivos ESPN o Eurosport. Sin embargo, en mi humilde opinión, el mejor fantasy football que uno puede encontrar actualmente es el de la liga inglesa (creado por la propia Barclays Premier League y al cual se puede acceder desde su misma página web), con una funcionalidad muy cómoda y vistosa, información de última hora sobre el estado de los futbolistas, juegos complementarios… ¡ah, y es gratuito! También gozan de una alta popularidad las fantasy’s de la página web de la Uefa (de sus tres competiciones principales: Champions League, Europa League y Eurocopa).

Esta industria ha llegado a un punto en el que prácticamente cualquier evento deportivo tiene su propia fantasy league, como por ejemplo el Tour de Francia (anteriormente realizado por el ya mencionado Eurosport), el campeonato de mundo de fórmula 1, la Liga Endesa de baloncesto (donde destaca el Supermanager, que también tiene una versión destinada a la máxima competición continental), o los torneos más importantes del circuito de la ATP de tenis. Actualmente existen miles de juegos de este estilo, cada uno con sus particularidades y variaciones, pues la única regla de los fantasy sports está en que las reglas las pone el mismo juego. Esto implica que los usuarios deben intentar descubrir la estrategia adecuada para cada uno de ellos, lo que implica, por ejemplo, estar atento a posibles rotaciones, analizar el calendario, buscar jugadores eficientes (esto es, cuyo precio no sea muy elevado pero su rendimiento sí), etc.

La llegada de Internet le dio a los fantasy games el empujón necesario para convertirse en una práctica totalmente global, lo que ha derivado en que actualmente se hayan convertido en juegos muy diversos y populares en todas partes del mundo.

Otra de las novedades que presentan los fantasy games con respecto a sus inicios es el presupuesto. De inicio, tenemos un determinado ‘dinero’ para crear nuestro equipo, y los jugadores tienen un precio preestablecido… así, los usuarios deben buscar el equilibrio para conformar un buen plantel. Por ejemplo, en la liga española, fichar a Messi y a Cristiano Ronaldo es garantía de sumar muchos puntos con ellos… pero a riesgo de quedarte con muy poco presupuesto para conseguir armar un plantel con jugadores competitivos. Hay millones de variantes posibles, y al fin y al cabo el mundo del deporte es en ocasiones tan imprevisible que está claro que la suerte es un factor fundamental en este tipo de juegos.

Sea como sea, celebrar un gol de un partido intrascendente entre dos equipos de media tabla inglesa, blasfemar contra un entrenador por dejar en el banquillo a un futbolista de tu equipo o tirarte de los pelos por haber tomado una mala decisión a la hora de hacer un fichaje forman ya parte de esta nueva — y emocionante — forma de ‘vivir’ el deporte que han creado los fantasy sports.