Incertidumbre bajo la cúpula del Bundestag

A pesar de no tener límite de gasto para la financiación de las campañas, los alemanes hacen gala de una austeridad casi impecable y nos están dejando a todos con las ganas de un espectáculo político como los que se montan nuestros vecinos los franceses (por no decir los italianos). La atmósfera es tranquila en las tierras alemanas, o por lo menos aparentemente, todo parece ir según lo previsto.

La foto que dio casi más que hablar que Miley CyrusFuente: sueddeutsche.de

La foto que dio casi más que hablar que Miley Cyrus
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¿Qué va a pasar el 22 de Septiembre?

El profesor de Políticas Públicas de la USC, Miguel Anxo Bastos lo tiene claro: “Pois vai ganar a vella. A min gustaríame unha coaligación dela cos do FPD, porque se garantizaría a mesma liña de politicas que ata agora“. Dicho de otra forma, el panorama es el siguiente: Por un lado está CDU, los conservadores con Merkel a la cabeza presumiendo de la gestión de la crisis, y por otro, el propietario del famoso dedo, el socialdemócrata Peer Steinbrück, quién dice querer “Una Alemania que sea fuerte por ser justa”. Aparte de los dos gigantes  enfrentados, están los liberales del FPD —que forman parte del actual gobierno de coalición—, la izquierda anticapitalista y los verdes.

En el primer y único debate de estas elecciones (que muchos analistas calificaron de puro trámite), Ángela Merkel repitió el discurso que ha estado lanzando durante la última fase de la legislatura:

“Alemania está en el buen camino porque su economía es robusta pese a la crisis europea y global, porque crea puestos de trabajo y porque el Estado ingresa tantos impuestos como nunca antes lo había hecho.”

Su contrincante, Peer Steinbrück se vio en una encrucijada. Por una parte, tenía la obligación de defender la Agenda 2010 que aprobó el último canciller socialdemócrata de Alemania, Gerhard Schröder. Por otra, para contentar a su electorado se vio obligado a criticar algunos aspectos de un paquete de reformas que, aunque muchos analistas dicen que salvó a Alemania de los efectos de la crisis económica, es en conjunto muy poco socialdemócrata: recortó impuestos y gasto público y redujo la duración del seguro de desempleo. Merkel mantuvo una clara ventaja sobre el candidato del SPD a lo largo de todo el debate, salvo cuando le preguntaron por el espionaje de Estados Unidos en Alemania. Aún así, supo salir del paso, y Peer Steinbrück no supo aprovechar la ocasión.

Promesas electorales

Los conservadores de la CDU/CSU defienden, básicamente, seguir con la política económica que lleva implantando Angela Merkel durante los ocho años que lleva en la cancillería. Prometen, además, un paquete de ayudas para las familias, políticas de fomento de la natalidad e inversiones en infraestructuras, educación e investigación que, según los cálculos del diario económico Handelsblatt, podrían costarle a las arcas públicas alemanas en torno a 28.500 millones de euros.

El FDP sigue al dedillo el manual político del liberalismo: se inclinan por evitar las subidas de impuestos para empresas y contribuyentes, por el incremento de protección de los datos personales y por una reducción de burocracia. En el marco europeo, apoyan el rigor presupuestario con el objetivo de que los países no se endeuden más.

En la oposición, Peer Steinbrück, al mando del Partido Socialdemócrata (SPD) contraataca prometiéndoles a los trabajadores y trabajadoras un salario mínimo (que todavía no tienen) de 8,5€ la hora. A esto le suma un plan de pensiones con 850 euros mensuales para los que hayan cotizado 30 años mínimos, y una subida de impuestos, cosa que Merkel ha criticado duramente en los últimos meses.

El edificio del Bundestag en Berlín, rediseñado por Norman Foster

El edificio del Bundestag en Berlín, rediseñado por Norman Foster

Más a la izquierda del espectro ideológico, Die Linke (La Izquierda) exige también que se establezca un salario mínimo, pero a 10€ la hora, y que la jubilación venga fijada en los contratos a los 67 años. Además proponen que los ricos paguen más impuestos y critican los rescates de los bancos con el dinero de los contribuyentes. Por su parte, Die Grüne (Los Verdes) defienden el ya clásico abandono de la energía nuclear, la reducción de la exportación de armas y una medida más bien pintoresca: la proclamación de un “día vegetariano” a la semana.

¿Y qué hay de España?

No cabe duda de que los resultados de estas elecciones condicionarán el futuro económico de nuestro país. En el caso de que Ángela Merkel se alíe con SPD o con los verdes, puede aflojar en algunas políticas, pero seguirá en la línea de las reformas, ya que según ella “son buenas y necesarias”.

Esto no cambiará mucho, ya que en el caso de que finalmente pactase con SPD, tal y como la propia canciller recordó en el debate, los Socialdemócratas “son impredecibles”.

No sería la primera vez que apoyen medidas de control del gasto público en los países del sur de Europa (ya sucedió durante toda la legislatura con el rescate a Grecia y el Mecanismo Europeo de Estabilidad).

El sistema electoral alemán, ese sistema que confunde hasta a los alemanes

El sistema electoral alemán está diseñado para evitar mayorías absolutas. Las papeletas con las que votarán los alemanes se dividen en dos columnas: en la primera se elige un diputado por distrito electoral. Son listas cerradas, y es la más importante, ya que determina la fuerza de los partidos en el parlamento. De esa primera columna saldrán 299 diputados para el Bundestag, uno por distrito electoral, por un sistema muy simple: el diputado más votado en un distrito se queda con el escaño.

Por esto, en la primera columna los alemanes suelen votar a uno de los dos partidos mayoritarios (CDU o SPD), que tienen más posibilidades de alzarse con la mayoría.

En la segunda columna votan a otros 299 diputados, que saldrán de listas cerradas propuestas por el partido para cada Länder (estado federado).

El problema que hay es que para que un partido consiga representación parlamentaria tiene que haber superado el 5% de los votos (o haber ganado en al menos tres distritos electorales).

La antesala de las elecciones federales: Baviera

Precisamente esta cuestión puede determinar el futuro político de Alemania, pues las últimas encuestas muestran al FPD, aliado preferencial de Merkel, rozando el 5%. Si no llegasen a este porcentaje de votos quedarían fuera del monumental edificio del Bundestag, lo que forzaría a los conservadores a pactar con los socialdemócratas o los verdes para mantener la cancillería.

Las elecciones del Länder de Baviera hicieron saltar las alarmas del FDP (y las de Ángela Merkel). La victoria fue para la CSU, hermanada con la CDU, lo cual no fue ninguna sorpresa, dado que llevan casi 60 años gobernando en uno de los Länder más ricos de Alemania. El problema fue que los liberales no consiguieron llegar al 5%. Si esto se repite en las elecciones generales, Merkel ya se puede estar buscando otros aliados.

Los últimos sondeos le dan un 39% a CDU/CSU, los verdes pierden de momento dos puntos y se quedan con un 9%; Die Linke asciende un punto y se sitúa con un 10%, pero a pesar de esto, el líder del SPD ha descartado pactar con ellos, cerrando así la puerta al 44% de los puntos que sumarían en coalición.

La reelección de la Canciller no será una sorpresa para nadie, por lo que los cambios, si los hay, serán en un segundo grado, dependiendo de con quién formen la coalición.

¿Por qué otra vez tú, Merkel?

Según dicen las estadísticas, Alemania ha crecido un 0.7% en el segundo trimestre, y su tasa de desempleo ronda el 5.6%, todo un logro si lo comparamos con la de España.

empleo.gob.es

© empleo.gob.es

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Por si fuera poco, el gigante germano se ha posicionado como la cuarta economía mundial. Con estos datos (y los de las encuestas), es muy probable que se premie con cuatro años más de mandato a la Canciller. Aunque también es posible que la oposición forme una gran coalición y desbanque las expectativas de Ángela Merkel, quién de momento mantiene una ventaja clara frente a Peer Steinbrück. Como dijo la propia Merkel, las elecciones no están hechas, “Cada voto cuenta el 22 de septiembre”