Videojuegos “indie”, ¿El futuro del entretenimiento?
El mundo de los videojuegos está pasando un pequeño bache. Las empresas le echan la culpa a la piratería, mientras que los usuarios optan más por decir que pagar 70€ por un juego es una barbaridad, o que últimamente solo se sacan re-ediciones malas de sagas míticas al andar escasos de ideas que valgan la pena. Los desarrolladores “indie” intentan poner una solución a esto, pero, ¿Qué son?
Un videojuego indie es aquel que es desarrollado por un grupo muy reducido de personas y sin ayuda de grandes empresas. Generalmente nacen del tiempo libre de desarrolladores con buenas ideas, pero con poco dinero. Muchas veces no llegan a nada, pero se pueden encontrar algunos casos en los que sus desarrolladores han conseguido millones.
Los comienzos de este tipo de juegos, por los años 80, se debe a la comercialización masiva de consolas que permitían la introducción de código fuente propio, pudiendo crear tus propios juegos si sabías cómo. Una de las más famosas que tienen este sistema era la Spectrum. Junto a esto, comenzaron a salir a la venta revistas que ofrecían códigos para que te montaras tu propio juego, ofreciendo incluso programas útiles, como el maravilloso programa que lo copia todo, y que no ocupa espacio en memoria. Un ejemplo de este tipo de publicaciones es la revista MicroHobby, que se edita en español y que podéis descargar desde su página. Esto, unido a que había un alto número de consolas diferentes en el mercado y un catálogo prácticamente infinito de juegos de escasa calidad, dio como resultado una crisis que se llevó por delante la mayoría de empresas que se dedicaban al sector, dando lugar a debates sobre si los videojuegos era un área rentable.
Los comienzos de este tipo de juegos, por los años 80, se debe a la comercialización masiva de consolas que permitían la introducción de código fuente propio, pudiendo crear tus propios juegos si sabías cómo.
Nintendo, para intentar salir de la crisis, sacó el “Nintendo Seal of Quality”, marca que colocaba en sus juegos (y que aún se veía no hace mucho) para demostrar que ese juego era garantía de calidad. Esto desprestigió bastante a los “juegos de revista”, haciendo retroceder a la empresa indie, que no volvería a resurgir hasta los ’90 con la popularización de Internet, y a vivir su máximo apogeo en la actualidad.
Gran parte de la “culpa” de este resurgimiento la tienen tiendas online que hacen que llegue al gran público, como por ejemplo Steam o Humble Bundle. En los Humble Bundle tenemos 4 o 5 juegos a los que nosotros pondremos el precio, y si superas la media de lo pagado por el resto de los usuarios, obtendrás dos juegos más por tu generosidad. En las últimas semanas hemos tenido la opción de comprar juegos más reconocidos por el gran público, como el Saint Row III, el Battlefield 3 o The Sims 3. Steam funciona de manera diferente. La tienda online de Valve mezcla grandes títulos con juegos de este estilo, ofreciendo así un catalogo bastante amplio y a muy buen precio, con descuentos diarios.

Un cree…PUM!
Minecraft es uno de los ejemplos de éxito. Comenzó como una idea de Markus “Notch” Persson, que consistía en un mundo hecho de cubos, donde tu única misión es la de sobrevivir. Una idea básica, pero que te da mil y una opciones. Esto hizo que este experto en desarrollo en Java, montara su propia empresa y con el paso del tiempo, consiguiese tener 23 personas en plantilla y más de 100 millones de dólares en ganancias además de conseguir que Sony quiera sacarlo en su nueva Play 4 y en PS Vita. Parte del gran éxito que ha tenido, viene dado por su gran comunidad, que, aparte de generar y comprar merchandising y de extender la idea del “tio, tienes que probarlo”, crea infinidad de mods [Añadido que se le hace al juego con nuevos objetos o mecánicas] que hacen aumentar considerablemente las horas de juego.
Minecraft es uno de los ejemplos de éxito. Comenzó como una idea de Markus “Notch” Persson, que consistía en un mundo hecho de cubos, donde tu única misión es la de sobrevivir. Una idea básica, pero que te da mil y una opciones.
Algún otro juego famoso del estilo es el Super Meat Boy, donde “encarnaremos” a un trozo de carne que intenta salvar a su novia de las terribles garras de un feto con monóculo y sombrero, cruzando una serie de plataformas con sierras y demás dificultades. Muy raro y sangriento todo. También tenemos el Rogue Legacy, un “hack and slash” típico. Osea, atacar a todo lo que se mueve dentro de un castillo. La peculiaridad está en que una vez que muramos, volveremos con uno de nuestros descendientes, que puede ser un caballero, un ninja, un enano…y que además sufren enfermedades como la de Tourette, daltonismo o que ven del revés. Tiene muchos más detalles que lo hace muy interesante. Por otro lado está Limbo, un juego muy oscuro, y no solo por su ambientación en las sombras. Narra la historia de un niño que despierta en el “borde del infierno” y va en busca de su hermana, pasando pruebas, arañas gigantes y encontrándose con otras extrañas sombras humanas.
La lista es casi interminable. Evoland, juego en el que iremos evolucionando de acuerdo a la historia de los videojuegos. Entretenido y una clase de historia The binding of Isaac, donde llevaremos a Isaac a través del infierno para escapar de las garras de su madre. World of Goo, juego de construcción en el que tienes que llegar de un punto a otro. Bastion, donde intentamos saber que ha provocado la destrucción del mundo mientras vamos mejorando nuestras armas. Fez, juego de plataformas en 2D de un mundo en 3D. Aclamado durante mucho tiempo antes de que fuera lanzado, con mecánicas de juego bastante curiosas. Braid, donde controlaremos el tiempo para poder aprender de nuestros errores. Y así podríamos continuar durante horas.
Sin duda, este campo de los videojuegos, es un terreno que debemos darle, al menos, una oportunidad.