Madrid, ¿2020?
Tercera candidatura consecutiva de Madrid para los Juegos Olímpicos. Tercer intento de ser la sede mundial del deporte. Todavía están recientes el “Preparados para ti” de Madrid 2012 y la mano multicolor de Madrid 2016. No se puede decir que a la tercera irá la vencida, ya que esta es la cuarta candidatura realizada por Madrid, aunque pocos se acuerden ya de la de 1972. Los pronósticos concluirán el próximo 7 de septiembre en Buenos Aires, donde el Comité Olímpico Internacional (COI) hará la elección definitiva para los Juegos correspondientes a la XXXII Olimpiada. ¿Será esta vez la definitiva? ¿Por qué fracasaron las candidaturas más recientes?
La candidatura del 2012 no tuvo mucho éxito. La llama roja de Mariscal, diseñador del emblema de Barcelona 1992, no gustó por lo que ni siquiera hubo logotipo oficial. El dilema no pudo aguantar hasta la cuarta y última ronda de votaciones, celebrada el 6 de julio de 2005 en Singapur. Inicialmente la valoración del COI parecía buena y Madrid obtuvo puntuaciones más que satisfactorias en parámetros como infraestructuras, medio ambiente, alojamiento, transporte… Aunque también hubo críticas a la ciudad. Destaca la realizada por Alberto de Mónaco durante las votaciones, cuando su pregunta sobre la seguridad de Madrid llegó como un dardo a la delegación española. Y el desenlace…el desenlace se llamó Londres.
Cuatro años más tarde, una mano volvió a ilusionar a los partidarios de unos nuevos Juegos con sabor español. Todo parecía estar más a favor. Las instalaciones que cuatro años antes ya estaban preparadas no iban a suponer un problema. Juan Antonio Samaranch, el Rey Juan Carlos, Alberto Ruíz-Gallardón, Teresa Perales y Raúl González fueron algunos de los enviados al Bella Center de Copenhague en octubre de 2009 para defender a Madrid como anfitriona. Pero nada. En la última ronda, la rotación de continentes hizo sombra a los esfuerzos españoles. Después de Asia en el 2008 y Europa en el 2012 tocaba cambiar de aires. Así que el COI eligió samba y se decantó por Río de Janeiro, que había presentado una candidatura encabezada por Lula da Silva y por el exfutbolista Pelé. Madrid tuvo que despedirse de la sirena danesa y girar la cabeza hacia un Brasil que había conquistado la sede del Mundial de fútbol 2014 y de los JJOO 2016.
Ahora toca centrarse en el 2020. La imagen de cinco arcos inspirados en la Puerta de Alcalá competirá con Estambul y Tokio, tras quedar eliminadas de la carrera olímpica Bakú y Doha. En un principio también se había ofrecido Roma, pero el primer ministro italiano Mario Monti decidió retirar la candidatura en febrero de 2012 por la mala situación económica del país. Siguiendo el criterio de la rotación de continentes, Tokio partiría como favorita. Pero el tsunami y el terremoto del 2011 son la principal desventaja para que el COI se decante por el país asiático. Un país que no presenta los mismos problemas económicos que España, a quien favorece su citada buena infraestructura deportiva. Estambul no tiene preparadas todas las instalaciones necesarias, pero su economía es buena y su situación geográfica entre Asia y Europa solucionan el dilema continental. Todavía hay dos puntos más a favor de Madrid 2020: la opción de que Estambul sea sede de la Eurocopa de fútbol 2020 y los Juegos de Invierno de Corea del Sur 2020. Esto hace que la ciudad turca tenga que decidirse entre Eurocopa o Juegos, y que Tokio pierda posibilidades por formar parte del mismo continente en el que se celebran ese año las competiciones olímpicas invernales.
Pronto se resolverán todas las dudas. Mientras, Madrid seguirá destacando lo que puede ofrecer a una competición tan importante, como se puede leer en el informe de candidatura:
Nuestro compromiso es ofrecer unos Juegos basados en
los valores del deporte y del Olimpismo como fuente de
inspiración de deportistas de todo el mundo, en un ambiente
seguro, de pasión y de entusiasmo, maximizando para las
generaciones futuras los beneficios sociales y económicos
del mayor evento del mundo .