Víctor Omgbá: “España nunca va a integrar a los inmigrantes”
A de Victorien Mboudou Omgbá, máis coñecido coma Víctor Omgbá (Yaundé-Camerún, 1966), é unha historia que ten moito de odiseica. Licenciado en Dereito no seu Camerún natal, chegou a España no ano 1995 cunha bolsa que nunca cobrou debido a un problema coa validación do seu título. Por mor disto, ao pouco de chegar viuse sen diñeiro, perseguido pola policía e traballando de maneira precaria para poder sobrevivir. Mais en lugar de darse por vencido tornou a súa vida nunha «sucesión de retos», que o levarían a fundar no ano 2001 a ONG Equus Zebra, organización que nestes 12 anos ten sido unha peza clave da axuda ao inmigrante na área da Coruña. Polo camiño, Víctor tivo tempo de escribir unha novela sobre a súa experiencia, titulada Calella Sen Saída (Galaxia, 2001); ademais de probar sorte no mundo do xornalismo, da man de La Voz de Galicia; e retornar á universidade para cursar de novo os estudos que se lle negaron. Víctor é un home de falar sereno e ademán canso, o tipo de ademán de quen leva toda a vida remando a contracorrente. Recíbeme no seu humilde despacho da Rúa Gambrinus, rodeado da gris paisaxe industrial do polígono de A Grela, onde se atopa o almacén de Equus Zebra. A conversa prolóngase durante unha hora e media na que temos tempo de tratar varios temas: dende a literatura ao colonialismo, e -de maneira máis profunda- o racismo. Unha triste realidade fomentada en moitas ocasións dende os propios poderes públicos.
Sen dúbida a imaxe do “inmigrante intelectual” non é común no noso país, ou cando menos non son cousas que se asocian.
Hombre, yo creo que cada uno tiene, digamos, el bagaje que ha podido ir acumulando a lo largo de la vida. Yo he tenido la suerte de hacer estudios superiores en Camerún, y también he podido estudiar aquí, aunque lo hiciese en parte por legalizar mi situación. Es lógico que cuando tienes esto, además de una mente inquieta, busques expresar o difundir tus ideas, sobre todo si te propones hablar de cosas tan preocupantes como la inmigración. Yo soy inmigrante, por lo que es normal que me comprometa a hablar de ese tema.
Polo tanto, pódese dicir que Calella Sen Saída é unha obra autobiográfica?
Bueno, yo diría que todo escritor tiene que partir de algo. Es decir, no se escribe una obra sin haber vivido. No existe realmente una obra que no esté comprometida, y que no tenga raíces personales, ya que todos partimos de experiencias vividas a la hora de contar una historia. En el caso de Calella fue lo que sucedió. Llegar aquí y ver un universo completamente diferente del que nos pintan fue un auténtico “shock”. Sí que traza alguna parte de la vida del autor, aunque como esta es realmente aburrida (risas) decidí añadir un poco de fantasía, por decirlo de alguna manera, con Antoine, que representa un ideal. Todos queremos, en la vida, parecernos a ciertos personajes. En realidad la escritura es una forma de expresarse, de liberarse. Todos tenemos muchos demonios interiores y es bueno soltarlos. Al fin y al cabo lo que cuenta es sentirse bien consigo mismo sabiendo que lo que estás contando son cosas que te gustaría compartir. La literatura, sobre todo, tiene esa posibilidad de compartir ideas, algo fundamental y que se lleva haciendo durante toda la historia del ser humano. Los escenarios y los medios han ido cambiando, pero el proceso sigue. Después, que a la gente le guste o no, es otra cosa. Yo no creo que haya libros buenos o malos, es algo muy subjetivo. Depende sobre todo del lector, de su experiencia. Se puede encajar o no en un libro.
Tamén hai quen escribe para si mesmo.
Creo que eso es un error. No hay que escribir para uno mismo, porque para eso ya está el pensamiento. Yo escribo para que la gente saque conclusiones, para que en parte se identifique y se sienta representada. Cuando se crea a un personaje como Antoine esa es la función que debe cumplir. Lo que yo quería era que la mayoría de los inmigrantes que leyesen el libro pudiesen identificarse con él. Eso es lo importante de un libro, que entone con los sentimientos de la gente.
Cónstame que tes varios proxectos literarios máis que non chegaron a publicarse.
Tengo muchísimo escrito. Pero el tiempo y las circunstancias han tenido como resultado que no haya concretado ningún proyecto editorial. Escribo constantemente. Ahora mismo estoy trabajando en una obra relacionada con la condición del negro en el mundo, reflexionando sobre los avatares que han sufrido los negros a lo largo de la historia, y sus causas. He estado realizando todo tipo de investigaciones históricas, desde la propia Biblia, para poder contextualizar el fenómeno. Sin embargo, creo que todavía no estoy preparado para lanzar una verdadera carrera literaria, porque la literatura es como la cocina a fuego lento. Los libros que surgen de una historia puntual son efímeros, y yo quiero evitar eso. Los buenos libros se escriben con mucho tiempo, mucha paciencia. Tengo libros que llevan hasta 12 años en proceso. Los voy ojeando, retocando y cambiando su enfoque. El día que me sienta preparado intentaré publicar todo el material que tengo.
Ti naciches unha década despois da independencia colonial de Camerún. Quedaba algo deste ambiente durante túa infancia?
Hombre, yo de eso ya no me acuerdo, pero las consecuencias de la independencia siguen muy presentes hoy en día. El neocolonialismo está a la orden del día, empezando desde el mapa, ya que África está troceada de forma brutal según la conferencia de Berlín. Han hecho lo que han querido, auténticas barbaridades. Han separado pueblos, incluso familias. Esto ha dado lugar a guerras, a veces alimentadas por las propias potencias. En África no se puede dar un paso hoy en día sin preguntar a Francia, a Inglaterra…
Viuse recentemente en Mali.
Es una prueba más de que los dueños allí son ellos. Es cierto que últimamente se está dando un fenómeno de violencia y secuestros contra occidentales, pero, sin justificar a nadie, creo que es una consecuencia de las malas políticas de sus gobiernos. Llega un momento en que los pueblos se rebelan, esto siempre ha pasado. El mayor problema viene de un fenómeno, como es el islamismo radical, orquestado por una serie de personas que pretenden adquirir un gran poder mediante la violencia, y se aprovechan de la situación.
Ve-lo islamismo coma unha ameaza para África, ou como algo residual?
Es un fenómeno que hay que tomar muy en serio. Sostienen que ha habido una deformación enorme de las costumbres islámicas, y su discurso se basa en eso, en que hay que reformar el dogma. Si ellos hubiesen utilizado la vía normal, la de la reivindicación y adaptación a la sociedad, no habría problema, e incluso creo que sería un movimiento muy interesante a estudiar. Pero es inaceptable desde el momento en que utiliza la violencia, el miedo y las mutilaciones, como se está viendo estos días, para hacerse fuerte. La ley musulmana no habla de mutilaciones en ninguna parte. Por este motivo es necesario detenerles, no tienen justificación alguna.
Que papel pode xogar a intervención estranxeira nese conflito?
La intervención extranjera siempre será vista como una imposición. Incluso los islamistas no radicales acaban dando la razón a los yihadistas. Intervenciones como la que está realizando ahora mismo Francia sólo animarán a que haya más atentados en otros países, como se está viendo ahora mismo en Argelia. Yo creo que es el propio pueblo el que debe darles la espalda, pero tienen a la gente tan atemorizada que es muy difícil que esto suceda. Aun así, es el único camino para acabar con esta situación.
Hai moitos inmigrantes que están sendo forzados a regresar debido á crise. Cres que isto terá efectos exclusivamente negativos para os países emisores, ou poderán sacar algo do retorno desta poboación?
Es difícil de decir… Puede que en el caso de inmigrantes que regresen de países como Francia o Alemania puedan jugar algún papel importante a su regreso, pero no en el caso de los inmigrantes de España. Esto es porque la integración ha fallado. La mayoría de los inmigrantes que llevaban aquí años, incluso décadas, están saliendo de aquí con nada. Algunos ni siquiera han aprendido correctamente la lengua, no han estudiado nada. Han estado buscándose la vida como mejor han podido. Un chico que ha estado vendiendo discos por ahí, ¿qué va a hacer cuando vuelva? Nunca podría ocupar un puesto técnico ni contribuir a la mejora de la situación de su país. Por esto creo que no va a servir de nada. Simplemente es una ola de fracasados que regresan con las manos vacías.
Máis alá da axuda humanitaria, cales cres que son as claves para que os países máis empobrecidos poidan saír do burato?
Yo creo que hay un problema que está minando mucho el desarrollo africano, que es la corrupción. Una corrupción casi pandémica. Son increíbles los extremos a los que puede llegar el ser humano. Esto es muy difícil de cambiar. Se necesita, primero un cambio de mentalidad, ya que la situación ha llegado a convertirse en una especie de ciclo. Es decir, «yo soy corrupto, y a la vez no quiero que haya desarrollo, ya que esto rompería mis privilegios», y esto impide en gran manera el desarrollo.
Otro de los problemas es el localismo de algunos líderes, que insisten en desperdiciar muchos recursos en sus regiones o pueblos, sin pensar realmente en cómo mejorar el país. Estos dos cambios son fundamentales, y creo que todavía pasará mucho tiempo hasta que estén realizados.
Hai esperanza para África, daquela?
Antiguamente África ya ha sido una potencia. Ha habido grandes imperios, como el Monomotapa o el Egipcio, y puede que le llegue su momento de nuevo, pero tendrá que estar preparada. Ahora mismo no lo está.
Cal cres que será o futuro de África na envellecida Europa?
Está claro que España necesita población. Toda Europa tiene la pirámide de las edades invertida, ya que el desarrollo ha llevado al envejecimiento. Por lo tanto, se necesita gente si se pretende hacer cargo de la población envejecida. Existen numerosos informes de instituciones oficiales que indican que de aquí a cincuenta años la situación se volverá complicada si no entra más población joven. Yo creo que ese papel lo podría jugar África. Pero ojo, hasta ahí no sabemos lo que va a pasar. Europa siempre ha sido una región muy prepotente en relación al resto del mundo, y sin embargo ahora se ve obligada a recurrir a las potencias emergentes, como Brasil o la India, para hacer negocios. ¿Qué pasa si en ese período las potencias emergentes avanzan lo suficiente como para superar a Europa? Podría quedarse atrás, obsoleta, y le será más complicado competir en ese nuevo panorama. Por eso no puede esperar tanto.
Dicía o outro día o xornalista Enric González nunha entrevista que «España é o país racista por excelencia».
(Sorrí) Hombre, es cierto que aquí todavía hay mucha hipocresía, y que existen diferentes formas de racismo. La gente está acostumbrada a este racismo burdo del tipo «negro de mierda, vuelve a tu país», creyendo que es el racismo más dañino que puede haber, pero no lo es. Este es otro de los temas que voy a tratar en el libro del que te hablaba antes. Hay muchos tipos de racismo, desde el racismo violento al racismo paternalista, el inteligente… Las sociedades han ido evolucionando, y con ellas también lo hace el racismo.
A que te refires con “racismo intelixente”?
El racismo inteligente es una forma de racismo en la que se dice: «podemos admitir a los negros dentro de la sociedad, podemos convivir con los inmigrantes, pero no podemos admitir jamás que triunfen». A partir de ahí, la sociedad que origina ese tipo de racismo hace que todo cuaje para conseguir que la vida de esos inmigrantes sea algo baladí, completamente desperdiciado. Es un tipo de racismo sutil, pero igual de dañino. Se podría decir que fue originado en los Estados Unidos en la década de los 60 y luego llegó a Europa. En España se está viviendo actualmente. Mira a tu alrededor, por ejemplo. ¿Cuantos negros hay dirigiendo una empresa en A Coruña? ¿Cuantos negros periodistas hay? Bueno, yo te puedo decir que fui el primer negro periodista aquí en Galicia, y no sé si el último. Y cuando se comienzan a analizar todos los factores se da uno cuenta de que incluso desde la propia administración se refuerzan estos comportamientos.
A crise está servindo como coartada para empeorar a situación, dende logo.
Está claro que los mayores abusos que se han cometido a lo largo de la historia han ocurrido siempre en una situación de emergencia, como una guerra o una crisis económica. Los gobiernos esperan este tipo de eventos para poder, por decirlo de alguna manera, cortar cabezas. Es entonces cuando atacan. Es curioso que en el mundo cuando hay situaciones de emergencia suelan triunfar las derechas, que aprovechan la situación como excusa para imponer lo que en otros momentos no se les permitiría. Lo estamos viendo en España ahora mismo.
Este é un país que sempre está culpando aos de fóra, por iso merca ese discurso.
No cabe duda de que es una sociedad que intenta siempre lavarse las manos al estilo de Poncio Pilatos, echando su mierda sobre los demás. Yo sospecho mucho de ese tipo de gobiernos. El de España es un problema de dirigentes incapaces que no quieren afrontar la realidad, que es la de un país en la que tanto ellos como nosotros los ciudadanos hemos hecho muchas cosas mal, y por eso se buscan cabezas de turco, que son realmente los que menos culpa tienen. Esta política siempre recae sobre los inmigrantes y los más desfavorecidos en general.
Dicías nunha entrevista a Cadena Ser o pasado marzo que Galicia é a túa casa.
Hombre, yo tengo la nacionalidad española, a pesar de que hay momentos de cada día en los que se me recuerda que sigo siendo extranjero, especialmente desde la administración. Yo me siento español y también camerunés, no voy a renegar de mis raíces. Soy de un país del que me siento muy orgulloso, y que a pesar de todos los problemas que tiene, es verdaderamente hermoso. España también lo es, y por eso pedí en su día la nacionalidad, no intenté buscarlo como un refugio para mí. Yo vi que había la posibilidad de que mis ideas pudiesen tener una mayor aceptación mediante este paso, que fuesen más reconocidas, pero que la propia administración no quiera tomar parte en esto es algo realmente lamentable, una verdadera pérdida. Y esta es la realidad de España, que es un país en el que jamás se ha hecho caso a los extranjeros. Esto no se ve de la misma manera en otros países que tenemos bien cerca, como Francia, en la que los inmigrantes aportan y se sienten parte de la sociedad. España no puede seguir negando su multiculturalidad.
Daquela, a administración é a maior culpable desta situación?
En el tema de la integración de los inmigrantes las dos partes tienen la culpa. El gobierno es una de ellas, por no impulsar unas medidas integradoras realmente eficaces para que el inmigrante se sienta parte de la sociedad, sepa que está siendo escuchado y que se le toma en cuenta. Esto origina que la otra parte, que es la parte inmigrante, no quiera integrarse porque ve que no sirve para nada. Aquí nosotros siempre hemos hecho un esfuerzo enorme por conocer la cultura del país, pero hemos topado con muchas dificultades. Todo lo que hacemos se limita a las cosas más triviales, como salir a tomar algo, etc. Pero a la hora de la verdad no somos aceptados. Esto provoca que el inmigrante se envuelva en sí mismo y haga una especie de nudo, por lo que se aísla de la sociedad.
Teño aquí unhas declaracións túas á Voz de Galicia en 2001, nas que dis que «hai moitas mentiras sobre a inmigración». Que é o que fai pensar aos inmigrantes que a vida aquí é tan boa? É simple desesperación, ou están realmente enganados?
Los inmigrantes cuando vienen aquí no vienen atados ni desconociendo lo que van a encontrar, no son tan borregos como para no investigar, aunque sea un poco, el país en el que van a entrar. Pero alrededor de todo esto se ha ido construyendo un imaginario, una gran mentira. Una mentira de una vida exaltada, exuberante, de lujo en occidente, cuando sabemos perfectamente que no es así. Una vez que esto está creado, es muy difícil detenerlo. Es muy difícil convencer a una persona en África de lo contrario, de que aquí hay mucha gente que rebusca en la basura para comer. Mi propio hermano no quiere creerme cuando le digo que esto es así, ya que lo que él ve en los documentales o en los videoclips no es la realidad de la mayoría. Pero eso no tiene efecto. Incluso sabiendo que aquí existen estos dos polos, siguen creyendo que quizás ellos tendrán suerte y podrán forjarse una vida mejor.
También he de decir que este tipo de ficciones no surgen solo en la parte de los inmigrantes, sino también en los propios países receptores. El gobierno siempre ha ocultado muchas verdades sobre la inmigración, de hecho nunca se dice la verdadera importancia de esta. Durante muchos años siempre se ha utilizado la inmigración para el trabajo sumergido. Hay zonas, como Ejido, que han sido prácticamente levantadas por inmigrantes. El Ejido es una de las zonas de España que más hortalizas produce gracias a los inmigrantes. Al gobierno antes le venía muy bien el tema de los ilegales, porque estos hacían un trabajo que los españoles no querían hacer, pero ahora la cosa no cuela, porque España tiene casi 6 millones de parados y la gente ya quiere esos puestos. Entonces vuelven esos viejos prejuicios de que los inmigrantes quitan puestos de trabajo, que en realidad al gobierno también le sirven para desviar la atención e incluso ganar algunos votos. Siempre se utiliza al inmigrante para justificar males. Cuando hay paro, violencia…
Canto hai de verdade no tema das mafias do tráfico humano? Cantos inmigrantes chegan por esta vía?
No tengo demasiados datos sobre el tema de las mafias, aunque conozco a personas que han sufrido en su piel esa situación. Todo el mundo sabe que si se quiere cruzar el estrecho hay que pagar, esto siempre ha existido, aunque no sé cómo actúan ni como se organizan. Yo mismo escribí un reportaje para La Voz de Galicia sobre un chico que cruzó todo el desierto para acabar en las manos de las mafias.
Ese é outro tema sobre o que quería preguntarche. Como chegaches a La Voz de Galicia e como describirías a experiencia no mundo do xornalismo?
Lo de La Voz de Galicia fue un reto que me había propuesto. En realidad toda mi vida se podría resumir en un compendio de retos. Empecé a trabajar en la Voz después de hacer su máster, en el año 2001. Sin embargo no era algo que me llenase, no tenía lo que estaba buscando. Me sentía como si no defendiese demasiado los ideales de los inmigrantes, que era lo que pretendía cuando entré. Desgraciadamente, fracasé en ese intento. Me fui de La Voz porque pensé que construir algo nuevo podría satisfacer esa ansia.
No voy a decir que me arrepiento de haberme ido, aunque es un mundo que me gusta, siempre que se trate con honestidad y sencillez. Por desgracia, en el periodismo las mentiras se utilizan mucho, y eso tiene su origen en que los propios medios no son independientes. En realidad todo depende del poder político en este país, desde el poder judicial a la información. Con esto solo se falsea el propio juego de la sociedad, y esto va en contra de todo sentido común. Hemos ido moldeando una sociedad que verdaderamente da asco. No se puede saber quién dice la verdad, ya que todo está manipulado. Coges una información de dos periódicos de ideologías diferentes, como pueden ser ABC y El País, y no tienen nada que ver. Esto es gravísimo, ya que los medios forman opiniones, y eso se traduce en votos.
Na mesma entrevista que mencionei antes, de Cadena Ser, semellabas moito máis contento coa túa situación do que estás agora. Que cambiou exactamente nestes meses?
Bueno, no ha sido nada radical. Yo he pasado mucho tiempo aguantando esto. Para ser sincero, a mí nunca me ha ido bien en Galicia. Nunca me ha ido bien quizás porque nunca encajé del todo en esta sociedad. Como te decía antes, existe este racismo escondido, inhibido, que no sale a la luz porque en principio está mal visto. No puedo evitar pensar, y siempre se lo digo a mi mujer, que ha sido un craso error haber estado aquí durante 18 años. Aunque yo llevo aquí todo ese tiempo, cada día se me sigue recordando que yo no soy de aquí. Aunque tengas unos estudios, aunque hables bien la lengua y sepas defenderte, no te consideran uno de ellos, siempre esquivan tus propuestas. Tanto desde la derecha como desde la izquierda hay trabas para todo. Si yo estuviera, por ejemplo, en Francia, ya estaría perfectamente integrado. Puede que no estuviese haciendo esto, quizás estaría dando clase en alguna universidad, pero aquí nunca se me ha dado nada, lo he tenido que ir conquistando todo a golpe de trabajo.
Da muchísima rabia pensar que todo eso ha sido en vano. Ha sido en vano no porque yo no quisiera hacer algo, sino por la sociedad. Y digo la sociedad entre comillas, porque obviamente ha habido mucha gente que me ha ayudado durante este tiempo. Pero la cosa se limita a eso, a personas individuales. Ese es el fracaso de la integración. España nunca va a integrar a los inmigrantes, ya ha tenido esa oportunidad y nunca lo ha hecho, entonces llega algún momento en el que ya no aguantas más, y dices «se acabó». Creo que ha llegado el momento de denunciar todo esto de manera clara, a ver si por lo menos tiene alguna repercusión de cara al futuro. La verdad, en este tiempo se me pasan muchas cosas por la cabeza, que me hacen darme cuenta de que he fracasado. Yo ya no tengo nada que perder. De hecho, no me importaría irme si no fuera por mi hija, que no tiene la culpa de nada.
Está ela adaptada, ou tamén existe racismo a ese nivel?
Si hay algo que tengo claro es que los niños son muy sabios, lo malo es que siempre los contaminamos con nuestras ideas. Un niño, en principio, non tiene miedo de nada, no conoce el miedo. Nosotros somos los que le vamos indicando los miedos, como puede ser el miedo a los fantasmas, o al propio dolor. Y es un poco lo que pasa con el negro. Aquí se inculca el miedo al negro, al inmigrante, y a partir de ahí se va formando el racismo. Las mejores charlas que yo he dado en mi vida, las que me han dejado verdaderamente asombrado, han sido a niños de entre 3 y 6 años. Te tratan con total normalidad. Ninguno se te queda mirando y pensando: «huy, si te toco a lo mejor me mancho de betún». Somos los adultos los que hacemos esto. Por supuesto, como dije antes, hay personas a las que les interesa fomentar estas actitudes, porque sacan algún beneficio.
Sei que agora estás decidido a denunciar publicamente a situación na que se atopa a ONG por mor da retirada das subvencións.
Mira, todo lo que nosotros tenemos aquí lo hemos conseguido porque hemos peleado muchísimo, desde la más absoluta humildad posible, y sin recibir una mísera subvención. Las pocas que nos han dado han sido, con perdón, una auténtica mierda. Hemos elaborado todo esto, y aun así en ningún momento ha habido un vuelco de la sociedad, nunca se nos ha apoyado. ¿Y por qué? Porque los pueblos racistas no quieren que se construya una historia, no quieren que los negros salgan adelante. Si por lo menos te dejasen en paz, pero ni siquiera eso se permite. Todavía te quieren callar, te dicen: «¿Qué estás haciendo? Tú vienes de fuera, montas una ONG y empiezas a criticar al gobierno, ¿quién te crees que eres?».
Estás vivindo iso agora mesmo?
Sí, claro. Por eso te lo digo. Hay una cosa que a mí me molesta especialmente, y es que los políticos creen que todo el mundo es tonto, cuando se ven perfectamente sus intenciones, como en el caso del Ayuntamiento de A Coruña. Por ejemplo, imagínate dos asociaciones: resulta que a una le va más o menos bien a fuerza de trabajo, porque nosotros lo hacemos todo en base a eso, la gente cobra una miseria aquí. Hay otra, por su parte, que vive de subvenciones públicas. En Equus Zebra tenemos un 70% de fondos propios sacados de nuestros servicios. Entonces, las pocas subvenciones que nosotros recibíamos aquí nos las quitan, mientras que a la otra asociación la refuerzan y le dan más subvenciones. Pero eso no es todo. Nosotros tenemos una cierta zona de acción, unos barrios en los que llevamos mucho tiempo desempeñando nuestra actividad, y ellos desubican su asociación, que actuaba en otra zona de la ciudad, y la implantan a dos manzanas de la nuestra. No hay quien se crea que es algo fortuito. Lo hacen por joder, está claro. Este tipo de comportamientos hay que denunciarlos. No por el hecho de que constituyan una competencia, sino por el hecho de que esté fomentado por la propia institución administrativa.
Lo que estoy haciendo no se debe sólo al tema de la subvención. Al final, la subvención me la quitan todos los años, fíjate. Me la dan para que yo no hable y me la quitan para presionarme, y lo llaman “defectos de forma”. Te dicen que no has presentado los papeles a tiempo y te la quitan, ¿y yo que voy a hacer? Todos los años lo mismo, pero estoy harto ya, por eso he tomado la decisión de decir las cosas como son. Estoy hablando de una subvención de 7500 euros, que nadie se piense que nos están dando una barbaridad, pero aun así es algo inaceptable.
Despois de todo isto, poderá Equus continuar a súa labor?
Sí, yo creo que sí. Es un proyecto que no depende tanto de mí, sino de muchos, y creo que es un proyecto muy bonito. Yo pensaba que a nivel de Ayuntamiento iban a verlo como algo diferente, un contrapeso a nivel institucional para los inmigrantes, ya que, como he dicho, necesitamos que se nos escuche y tener una voz. Pero lo que han hecho es lo que llevan haciendo toda la vida, utilizar sus tretas y engaños. Yo ya los conozco perfectamente. Por eso hay que decir «basta».