La cara B de los Goya: Hijos de las nubes

Los hijos de las nubes no conocían fronteras. Durante siglos vivieron siguiendo las nubes, que contienen el tesoro más preciado del desierto.  Elena Anaya, narración del documental

HDLN

©ecartelera.com

Los Goya no terminan con la Mejor Película, el Mejor Director, o el vestido de Penélope Cruz. Después de todos los titulares que generarán Fernando Trueba o Lo imposible, están esas categorías “de segundo plano”. Esas que aparecen en los sumarios, o en los periódicos que como el día de la Lotería, plasman a todos los números premiados en letra pequeña y “por compromiso”.

El Goya a la Mejor Película Documental está en ese segundo plano. En principio, no suele ser una categoría que llene páginas de periódicos. Muchas personas ni sabrán que hay una categoría en sí, y otros tantos no habrán escuchado el nombre de las nominadas. Este año, ese segundo plano en el que está el Mejor Documental tiene un nuevo foco que lo alumbra. El que es famoso ahora por ser ‘el nuevo malo de James Bond’, Javier Bardem, está detrás del cartel de uno de los nominados. ‘Hijos de las nubes. La última colonia’, está protagonizada por el que un día hizo de Ramón Sampedro.

Los ‘Hijos de las nubes’ son los saharauis, un pueblo tradicionalmente nómada que tuvo que frenar sus pasos por fronteras políticas. El territorio del Sáhara Occidental está dividido ahora entre la parte liberada (en la que están los campos de refugiados) y la parte ocupada por Marruecos. Y en el medio, un muro de 2.500 kilómetros con sus aproximadamente 10.000 minas.

Ficha Hijos de las nubesEl documental mira hacia y desde el Sáhara Occidental. Por un lado es una lección de historia sobre el pueblo saharaui, la descolonización del territorio, y el conflicto que existe desde hace 37 años. Por otro, un intento de dirigir los focos hacia los refugiados. Esta historia, como todas las importantes, empieza en un pasillo con hombres con traje de chaqueta, y termina en una sala con micrófonos y corbatas. Pero lo que tiene de especial es que nunca abandona la arena del desierto. El camino hacia esa sala es el de un pueblo abandonado, representado por Álvaro Longoria -el director-, Bardem, y el equipo del documental. Al final del pasillo, un momento de atención mediática: los micrófonos de la ONU y la voz de Bardem en nombre de los 200.000 saharauis que viven en campos de refugiados.

La historia se empieza a gestar en la cabeza de Bardem cuando va al Festival FISahara en el 2008. En Festival de cine se realiza en los campos de refugiados saharauis, y los asistentes conviven con ellos. En ese momento se crea la plataforma ‘todosconelsahara.com’, que llega a recoger más de 230.000 firmas de ciudadanos españoles que apoyan la causa saharaui. Y poco después, se comienza a rodar el documental.

El objetivo del director, Álvaro Longoria, y de Bardem, era agrupar opiniones sobre un conflicto olvidado. Más de 30 voces -entre las que hay activistas saharauis, políticos europeos, miembros de la ONU y de la MINURSO, académicos, refugiados saharauis y cargos de la (reconocida a medias) RASD- dan forma al documental. Y como pasa muchas veces, los que terminan de hacer el documental son los que guardan silencio. Ninguna autoridad marroquí aceptó ser entrevistada: el “otro lado” del conflicto no está interesado en hablar. Pero en el lado del silencio también hay nombres españoles, franceses y argelinos.

Una parte importante del documental la crean los testimonios, las voces que explican y opinan sobre el conflicto. ‘Hijos de las nubes’, en su intento por incluir todos los puntos de vista posibles, ofrece multitud de posturas, a veces muy opuestas entre sí.

Este problema no es un drama humano. Si de verdad hubiera un drama humano, se hablaría de él. No se habla de él.

JEAN FRANÇOIS PONCET, Ministro de Asuntos Exteriores Francia (1978-1981)

Nadie quiere hablar sobre este tema. Algo ocurre casi todas las semanas en relación al Polisario, aunque los medios no hablen de ello.

PAUL NAHON, France Televisión, Director de Informativos (2005-2009)

Una vez rodado el documental, el equipo de ‘Hijos de las nubes’ quiso que la grabación no se limitase al propio documental, y por este motivo recogieron las impresiones y emociones de diferentes personalidades (Javier Cámara, Pilar y Carlos Bardem, la representante de la Asociación Pro Derechos Humanos Nuria García, o el historiador y catedrático de historia del Islam contemporáneo, Bernabé López entre otros muchos) tras haber visto la película.

Bardem y todo el equipo del documental, tienen una ventaja. Ellos entran como espectadores en un conflicto anclado en el tiempo, y pueden contarlo desde su  indignación, su empatía con quien les acoge, y la rabia de quien se siente impotente. Ellos pueden contarlo desde fuera. Ellos, una vez que se vayan, se pueden alejar del conflicto. Los que se quedan allí, sin embargo, solo pueden imaginarlo. Parte del sueño de ‘Hijos de las nubes. La última colonia’ podría hacerse realidad el 17 de febrero en la gala de los Goya. La fecha que no está tan clara es la que esperan los refugiados saharauis.